sábado, 18 de febrero de 2012

Tres historias de Amor (Femme Fatale)

Alta, con buenas curvas y generosos senos. Genevieve se miró al espejo y deseó tener la mitad de su edad, veinte años. Todavía era una mujer despampanante pero las arrugas de su piel eran protagonista principal de todas sus visitas al psicólogo. Vivía sola, en un apartamento del centro de Torremolinos. Esta noche será especial, se decía mientras se hacía fotos picantes frente al espejo, vestida con un conjunto interior negro. Terminó su atuendo con un sencillo vestido que tapaba lo justo y era muy fácil de quitar. Esta noche sería recordada por todos los hombres de Málaga, se decía mientras se perfilaba los lábios...
Llamó al ascensor, buscó un taxi y antes de un suspiro ya recibía las babas de todos los borrachos del antro en el que decidió meterse.

Rocío era dulce y sensual. Su cuerpo estaba modelado en gimnasios de toda la ciudad, se cambiaba cuando todos habían sido suya... Cuando entró el la disco todos se fijaron en ella, pero aquello cambió cuando hizo aparición aquella diosa. Se acercó a ella, la desnudó con la mirada y pronto tenía su lengua rozando su paladar. Ya había tenido relaciones lésbicas pero su nueva compañera de cama no parecía haber disfrutado nunca de tales servicios. Su lengua se introdujo en todos los rincones secretos posibles y, justo al sentir el clímax de la mujer en sus dedos, deslizó la mano libre debajo de la cama y sacó el arma mortal. El cuchillo de veinte centímetros se introdujo suavemente entre las costillas de su victima. Ya nunca le robaría la atención de los hombres. Mientras la veía morir le dijo: "Te doy la muerte que quieres, perra. Con algo grande dentro de ti"

Genevieve perdía el sentido poco a poco y, muy a su pesar, sentía que le venía otro orgasmo al oir aquellas palabras...

jueves, 9 de febrero de 2012

Tres historias de Amor (Decepción)

Delgada, bajita y de boca grande. Sus ojos eran negros y su piel canela. Las curvas de su cuerpo podrían ser tocadas por las cuerdas de una guitarra pero nació mujer, perfecta. Se levantó de noche, se puso su vestido de fiesta, que enseñaba las piernas, y de pronto ya estaba en la disco. Le gustó ese chico especial que todas buscan, guapo y divertido. Se dejó amar, como la arena caliente bañada por las olas en un dia de verano. Fue un amor intenso y como amor intenso acabó muy pronto. Un dia bien y otros mal. El chico dulce y simpático no era más que un montón de basura, lo que abunda en la noche. Lo dejó marchar y se quedó sola, sola de nuevo hasta de noche despertar...

miércoles, 8 de febrero de 2012

Tres historias de Amor (Desesperanza)

La pícara sonrisa nació en sus labios mientras se acariciaba dulcemente el pelo. La conoció un buen dia, en un buen año. Le dijo "hola" y se besaron. Su fragancia era dulce mientras la desnudaba. Descalza era el símil de un veneno, morena y atrevida, peligrosa. En cambio, sus zapatos de tacón marcaban el paso de un millar de besos perdidos en el olvido. Sabía moverse, sabía hablar, todo en ella incitaba al amor y al deseo. Cuando descubrió su voz un millar de elementos nuevos nacieron en el firmamento, fue la explosión de las galaxias en su simple pecho. No era joven pero en el nacer de sus mejillas tenía un lunar que no tapaban los años. Quizás en otro tiempo podría haberlo amado, quizás en otros años, quizás en otro estado. No pudo más que poseerla en físico, pues el desengaño de otros hombres la había inmunizado contra el amor. Tras culminar su pasión, algún tiempo después, su adoración cayó desatendida, relegada. No pudo salvar lo que quedaba de ella pues tal cosa era nada. Ninguno de nosotros podría haberla ayudado, pues no existe llama más viva que la del fuego apagado.